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6 claves para el discurso de fin de año empresarial

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El año termina y tu oficina y tu vida se llena de encuentros, reuniones y brindis. Llega el momento de dar algunas palabras para el fin de año.

 

¿Te ha pasado oír discursos aburridos que no coinciden con el espíritu festivo y de satisfacción que compartimos todos en la oficina luego de meses de trabajo duro y objetivos cumplidos?

 

Es natural que entre llamadas, reuniones y problemas consideramos estas palabras como un trámite más. Sin embargo, es importante que sepas que los discursos de fin de año son la base para una conexión con tu equipo, una oportunidad que los mueva e incentive para comenzar el nuevo período laboral.

 

Allí tú lideras y la gente te estará escuchando atentamente. Tus palabras harán que las personas sigan en ese estado de satisfacción o, por el contrario, comiencen el nuevo año desmotivados.

 

El discurso puede ser para 5, 10 o 100 personas. Puede darse en la cena de fin de año con todos los empleados presentes o sólo con tus colaboradores directos en una mesa chica. Eso no importa. Lo que sí importa es que tiene que ser efectivo.

 

Consejos para un discurso de fin de año

 

Con estas pautas podrás afrontar un discurso laboral que marque una verdadera transición entre el año que se va y el que llega.

 

RECONOCE Y AGRADECE

 

Otro año pasa y si los objetivos se cumplieron, fue gracias al trabajo y al esfuerzo de TODOS. Con tus palabras reconoce a cada una de las áreas (o si puedes, a las personas) que tienes a tu cargo independientemente de que algunos hayan sobresalido más que otros. Cuando termine la reunión, todos deberán volver a sus tareas motivados.

 

SÉ TRANSPARENTE

 

El discurso tiene que estar alineado con tu personalidad. Un gerente que por lo general es serio y callado pero que en el discurso de fin de año se muestra alegre y chistoso, puede generar rechazo y hasta falta de credibilidad. Sé tú mismo para evitar proyectar una imagen distorsionada entre tus colaboradores.

 

MIDE LOS OBJETIVOS

 

Me pasa que luego de un gran logro necesito un momento para disfrutarlo. A las personas que trabajan contigo seguramente les pase igual y ese ratito de relajación son los días de fin de año. Por eso evita sacarlos de ese estado adelantándoles grandes metas para el año que viene. Mejor muéstrales objetivos parciales y alcanzables que les inspire confianza. Ya habrá un momento para hablar de los grandes desafíos al frente.

 

PON UN TOQUE HUMANO

 

Recuerdo que cuando recién empezaba a trabajar veía a los gerentes y directores como intocables. Los tiempos van cambiando y hoy es necesario que, sin importar el cargo que ocupes, le hagas saber a tus colaboradores que eres igual que ellos. Puedes agregar anécdotas o historias personales al discurso para empatizar con los oyentes.

 

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PON ENTUSIASMO

 

Si bien tienes que mostrarte tal cual eres, es fundamental que se te vea contento de estar allí, confiado y entusiasta por los logros alcanzados y los desafíos por venir.

 

SÉ BREVE

 

Está comprobado que un buen discurso no debe superar los 13 minutos. Pasado ese tiempo, la gente pierde la atención y el interés.  Este es un espacio donde el único objetivo es agradecer y celebrar.

 

 

Aquí te he compartido una breve guía para un discurso de fin de año que motive y predisponga para seguir trabajando y cumpliendo objetivos.  Y a ti, ¿ya te ha tocado dar un discurso así? ¿Cómo te preparaste para ello?

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